El dueño de una estación de servicio en Rusia (un loquillo astuto) decidió regalar combustible a todas las conductoras mujeres que aparezcan en bikini. A muchas de las cuales no les importa mostrar un poco de piel y beneficiarse de esta oferta.
El dueño de una estación de servicio en Rusia (un loquillo astuto) decidió regalar combustible a todas las conductoras mujeres que aparezcan en bikini. A muchas de las cuales no les importa mostrar un poco de piel y beneficiarse de esta oferta.